El tambor chamánico es capaz de hacerte ver y sentir rincones de tu espíritu que hasta ahora no habías conseguido ver. Para iniciarte en el camino del tambor chamánico, aquí te mostramos cómo recitar algunas oraciones al ritmo del tambor.
Oh, Gran Espíritu
Cuya voz oigo en el viento
y cuyo aliento lleva vida a todo el mundo,
¡escúchame! Soy pequeño y débil, necesito tu fuerza y sabiduría.
Déjame andar en la belleza, y haz que mis ojos atraviesen la puesta de sol roja y púrpura.
Haz que mis manos respeten las cosas que has construido y que mis oídos se afinen para escuchar tu voz
Hazme sabio para que pueda comprender las cosas que has enseñado a mi gente
Déjame aprender las lecciones qué has escondido en cada hoja y en cada piedra
Estoy buscando la fuerza, no para ser más grande que mi hermano si no para combatir a mi mayor enemigo, yo mismo
Haz que siempre esté preparado para llegar ante ti con manos limpias para poder mirarte a los ojos.
Aquí te mostramos otras plegarias para decir con el tambor chamánico:
Espíritu del lobo
tú qué vagas por la tierra salvaje
Tú qué haces Chas en las calladas sombras
Tú que corres si saltas entre los árboles más frondosos
Préstame tu fuerza primigenia
Y la sabiduría de tus ojos ardientes
Enséñame a rastrear mis deseos implacablemente
Y a echarme en defensa de aquellos a quienes amo
Enséñame las sendas ocultas de los caminos iluminados por la luna
Espíritu feroz
Camina conmigo en mi soledad
Aúlla conmigo en mi alegría
Protégeme mientras camino por este mundo
Estas oraciones están traducidas de las oraciones antiguas que decían los chamanes indios cuando empezaban a ejecutar su música y sus bailes siempre con distintas intenciones, como por ejemplo encontrar caza suficiente para alimentar a la tribu, pedir la lluvia, sanar enfermedades, etcétera.
El hombre occidental cuando empezó a ser testigo de estas danzas con tambores chamánicos restó importancia a estas actividades arguyendo que no tenían ninguna explicación científica.
Hoy sabemos que esto no es exactamente así, ya que se han realizado varias pruebas científicas intentando medir la reacción de una persona bajo la influencia de la música de un tambor chamánico y se ha llegado a la conclusión de que el estado anímico de la persona cambia, e incluso puede tener propiedades curativas.
A los vientos del sur
gran serpiente
Envuelve tus haces de luz alrededor nuestro
Enséñanos a librarnos del pasado del mismo modo en que tú te libras de tu piel
A andar suavemente por la tierra
Enséñanos el camino de la belleza
A los vientos del oeste
madre jaguar
Protege nuestra medicina
Enséñanos el camino de la paz, para vivir con honestidad
Enséñanos el camino más allá de la muerte
A los vientos del norte
Colibrí, abuelas y abuelos
Nuestros ancianos
Venid y calentar vuestras manos con nuestro fuego
Susurrando nos en el viento
Honramos a los que habéis sido antes que nosotros
Y a los que vendréis después de nosotros, los hijos de nuestros hijos
A los vientos del Este
Gran águila, Cóndor
A nosotros desde el lugar del sol naciente
Protegernos bajo vuestras alas
Mostrarnos las montañas con las que no nos atrevemos ni a soñar
Enseñándoos a volar ala con ala con el Gran Espíritu
Madre Tierra
Hemos reunido para la curación de todos tus hijos
La gente piedra, la gente planta
A los de cuatro patas, a los dedos patas, a los que se arrastran entre las sombras,
A los que tienen aletas, a los que tienen piel, y a los que tienen alas
Todos nuestros hermanos
Padre Sol
Padre Sol, abuela luna, a las naciones de las estrellas
Gran espíritu, al que llaman con más de 1000 nombres
Y a la vez eres el innombrable
Gracias por reunirnos
Y permitirnos cantar la canción de la vida
Todas estas oraciones deben decirse al ritmo de los tambores chamánicos y una vez terminadas las sesiones el espacio donde se han realizado estas debe cerrarse.
Sobre todo, es importante cerrar este espacio al final de la semana. Se debe hacer así para crear una atmósfera de paz y protección.
Para cerrarlo debes hacer lo mismo que has hecho al abrirlo: recitar cualquier oración, pero es particularmente efectiva la llamada de las cuatro direcciones, esta última que te hemos mostrado, y agradecer a los grandes arquetipos que te acompañen en tu camino, la serpiente, el jaguar, el colibrí y el águila.
De esta forma mantendrás y tu casa libre de las malas vibraciones y la convertirás en un oasis de paz y de curación.
Si sigues interesad@ en los tambores chamánicos, quizá quieras conocer algunos de sus muchos usos.